CALENDARIO LUNAR Y FESTIVO 2025

Los días de luna nueva y luna llena la escuela cierra por ser días de descanso según la tradición de ashtanga yoga. La escuela cierra también en días festivos.
Enero:
1 y 6 de enero. Festivos
13 de enero. Luna llena
29 de enero. Luna nueva
Febrero:
12 de febrero. Luna llena
28 de febrero. Luna nueva
Marzo:
14 de marzo. Luna llena
29 de marzo. Luna nueva
Abril:
13 abril. Luna llena
17 y 18 de de abril. Festivos
27 de abril. Luna nueva
Mayo:
1 y 2 de mayo. Festivos
12 de mayo. Luna llena
15 de mayo. Festivo
27 de mayo. Luna nueva
Junio:
11 de junio. Luna llena
25 de junio. Luna nueva
Julio:
10 de julio. Luna llena
24 de julio. Luna nueva
25 de julio. Festivo
Agosto:
9 de agosto. Luna llena
15 de agosto. Festivo
23 de agosto. Luna nueva
Septiembre:
7 de septiembre. Luna llena
21 de septiembre. Luna nueva
Octubre:
7 de octubre. Luna llena
21 de octubre. Luna nueva
Noviembre:
1 de noviembre. Festivo
5 de noviembre. Luna llena
10 de noviembre. Festivo
20 de noviembre. Luna nueva
Diciembre:
5 de diciembre. Luna llena
6 y 8 de diciembre. Festivos
20 de diciembre. Luna nueva
25 de diciembre. Festivo
Descansar en los días de luna tiene que ver con la tradición hinduista de donde procede nuestra práctica. Pattabhi Jois, maestro de Ashtanga yoga, solía cerrar su escuela esos días para dedicarlos a rituales, cantos y prácticas meditativas específicas y honrar así las festividades regidas por el calendario lunar. Realmente, las celebraciones de casi todas las culturas y tradiciones del mundo – también la nuestra - están relacionadas con los ciclos lunares.
Por otro lado, se dice que en esos días del mes la energía de la luna ejerce una influencia tal sobre la tierra y nuestros cuerpos (formados en un 70% por agua) que se recomienda hacer prácticas más suaves o acordes con la energía que disponemos en ese momento. Por lo general en los días de luna llena la energía es más expansiva. Nos podemos sentir tan cargados hasta llegar a perder el enraizamiento a la tierra. En cambio, a los días de luna nueva suele corresponderle una energía más contractiva, y solemos sentirnos con poca energía y capacidad para una práctica física intensa y dinámica. Esto no es una regla única porque cada persona una tiene sus ritmos, su historia y sus circunstancias, pero puede considerarse una guía en el camino.
Sea cual sea nuestra sensibilidad a la luna, reconectarnos con los ritmos de la naturaleza es una necesidad urgente para todos los seres humanos que habitamos este planeta. Seguir el calendario lunar es una manera de reconectar y respetar los ritmos circadianos y ciclos naturales, y de sintonizarnos con nosotros mismos y la profundidad de nuestro ser. Reconectar con nuestra verdadera esencia es a donde apunta nuestra práctica de yoga y la naturaleza nos ayuda a ello cuando le prestamos atención y la respetamos. Es un buen ejercicio observarnos en cada momento del mes y sentir cómo nuestra energía va fluctuando, contrayéndose o expandiéndose, para que adaptemos cada actividad (y cada práctica) a cómo nos encontramos cada día. Algunas personas se pueden sentir más sensibles no tanto el mismo día de la luna, sino algunos días antes o después. Cada persona es un mundo y la práctica consiste precisamente en que nos sintonicemos con nuestros biorritmos.
Para quienes tengan un compromiso importante con la práctica, no practicar en los días de luna implica tener un tiempo extra al mes para el descanso y la regeneración de nuestro cuerpo.